jueves, 27 de noviembre de 2008

El Bruce Lee de mi gimnasio...


Pues sí, voy al gimnasio...
Me gusta. Lo admito. Y no lo digo por quedar bien. Me da igual quedar bien. Tampoco lo hago por la línea, a la vista está que mi figura no es "gimnástica" jijiji. Me da igual. El caso es que me gusta sudar en ese recinto cerrado a ritmo de música electrónica o levantando pesas (siempre a ritmo de música electrónica, no me gustan las máquinas), me despeja y me divierte.
Y hay días que me divierte más que otros. Como los martes.
Los martes tengo clase de "body combat". ¿Y eso qué es? dirán ustedes, pues el "body combat" es una mezcla entre el "kick boxing" (eso que suele hacer Jean Claude Van Damme, creo) y el aerobic, por supuesto a ritmo de música, que no suele ser electrónica sino más bien rollo "banda sonora de película de peleitas", algo así como "una clase para sentirte Rocky", pero sin serlo, claro... :)
Pues a mí me gusta sentirme Rocky los martes. Me confieso: señoras y señores, me llamo Lorena, hablo sola por la calle y los martes me siento Rocky...
Y así soy yo feliz.

Bueno, pues mis humildes ansias de ser Rocky (que se desvanecen cada vez que me miro al espejo al pegar un puñetazo al aire y ver lo mal que pongo la cara de Rocky... jiji) conviven con las ansias de un compañero de clase, pero creo que él prefiere sentirse Bruce Lee...

El caso es que este chico sí que se mete en el papel... efectos especiales incluídos (yo lo tengo al lado casi siempre y puedo escuchar sus "¡toma!", "¡pam!", "¡chaca!", etc. cada vez que da una patada o un puñetazo a su invisible oponente...). Incluso, como sabe más que el profesor, suele ignorar los pasos que éste marca e improvisa por su cuenta extrañas combinaciones secretas, sin duda reveladas por algún viejo maestro oriental en su lecho de muerte... Todo esto mientras nos mira a los demás como diciendo "pobrecitos, miradme y admirad mi potencial"...

Y yo lo miro y, lo siento, pero tengo que hacer esfuerzos para no partirme de risa... (esfuerzos extra, porque ya los hago para no partirme de risa cada vez que me miro al espejo y me veo dando patadas o puñetazos con cara de Rocky, to seria... jaja)

Cuánto ego incomprendido anda suelto por el mundo...

Mientras tanto, yo sigo feliz riéndome por dentro de mi propia cara de Rocky (a poner cara de Bruce Lee ni me atrevo..jiji) y me quedo con la frase preferida de mi pájaro preferido:
"qué falta de cariño esta la gente..."

Y, como dice Silvio:



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